Todos los días vienen esos niños poetas

que crecen sin saberlo, con sus prisas tremendas,
ellos escriben risas, estelas en el aíre,
con finísimos hilos, capaces de coserte,
a lo más desterrado de corteza terrestre:
el animal progreso, no quiere olvidarlos,
y mirando a niños, él usa la vacuna,
recordando pizarra; dentro de tu maleta.
1 comentario
Marta -